La noche del jueves (5), Palmeiras vio cómo su sueño del Tetra en la CONMEBOL Libertadores se convertía en una pesadilla. A pesar de jugar en el Allianz Parque, con una audiencia de 40.398 aficionados entusiastas, Verdão fue derrotado por 4-2 en los penaltis ante Boca Juniors, tras empatar 1-1 en el tiempo reglamentario. Con ello, Palmeiras se despidió del certamen continental en semifinales.
Esta fue la cuarta vez que el equipo bonaerense venció a Alviverde en una serie de eliminatorias en la competición, repitiendo las hazañas de la final de 2000 y las semifinales de 2001 y 2018. En las dos primeras ocasiones, las victorias de Boca también se decidieron en los penales.
En la gran final, Boca Juniors se enfrentará a Fluminense, que se clasificó el pasado miércoles (4) al eliminar a Internacional en Beira-Rio. El emocionante choque tendrá lugar el 4 de noviembre, en el Maracaná, y será transmitido en vivo por ESPN en Star+.
En el propio partido, los equipos empezaron con cautela, estudiándose unos a otros, lo que resultó en pocas oportunidades al principio. La primera oportunidad importante llegó para Palmeiras en el minuto 14, cuando Gabriel Menino disparó desde fuera del área, obligando al portero Romero a aprovechar el rebote. Rony intentó aprovechar, pero acabó cometiendo una falta, recibiendo tarjeta amarilla.
Sin embargo, Boca Juniors tomó el control del partido tras el susto inicial. Con marcaje sólido y transiciones eficientes, el equipo argentino anotó un hermoso gol en el minuto 23, cuando Merentiel se lanzó por la izquierda y cruzó raso para que El Matador Cavani rematara con precisión.
¡Este fue el primer gol de Cavani en partidos de Libertadores en toda su carrera!
Con el marcador desfavorable, Palmeiras mostró nerviosismo en el campo, cometiendo muchos errores de pase y centros imprecisos. Boca Juniors aprovechó esta situación, con el joven Barco provocando tarjetas amarillas a Gustavo Gómez y Raphael Veiga.
Rony todavía tuvo la oportunidad de igualar en el tiempo adicional, pero la defensa del Xeneize logró esquivarla, manteniendo la ventaja de 1-0 para los visitantes al descanso.
En la segunda parte, el técnico Abel Ferreira hizo dos cambios inmediatamente, introduciendo a Kevin y Endrick para intentar darle un nuevo impulso al equipo. Palmeiras mejoró considerablemente, creando oportunidades de ataque por las bandas.
En el minuto 11, Endrick sirvió a Mayke, que intentó un centro, pero el balón acabó yendo hacia la portería y Romero realizó una espectacular parada.
Endrick, de sólo 17 años, siguió siendo protagonista en el partido y en el minuto 21 fue derribado por Rojo, que recibió una segunda tarjeta amarilla y fue expulsado.
Luego, Abel Ferreira adoptó una postura aún más ofensiva, reemplazando a Gabriel Menino por Flaco López para aumentar la presión sobre Boca Juniors.
La insistencia de Palmeiras tuvo su recompensa en el minuto 27, cuando Piquerez disparó desde fuera del área, el balón se desvió en la defensa y superó a Romero, igualando el marcador 1-1.
Los aficionados del Palmeiras estallaron de alegría coreando “Palmeiras es el equipo que remonta” en el Allianz Parque.
En los últimos 15 minutos, Palmeiras se lanzó al ataque, con el joven Luís Guilherme entrando al partido en un intento de darle la vuelta al partido.
Los argentinos, por su parte, adoptaron una actitud más defensiva, buscando retrasar el partido con varias paradas, lo que provocó la caída de varios jugadores de Boca al terreno de juego.
En el descuento, una jugada increíble: Luís Guilherme centró y Rony pegó una espectacular chilena, pero Romero hizo una increíble atajada que garantizó el empate para Boca.
Como resultado, la decisión semifinal pasó a la tanda de penaltis.
Los porteros se destacaron: Weverton detuvo el disparo de Cavani, pero Romero respondió con una espectacular parada de Raphael Veiga. Sin embargo, Gustavo Gómez desperdició otro disparo para Palmeiras, mientras Romero atajó el disparo en el córner, garantizando la victoria de Boca Juniors por 4-2 en los penales y su pase a la final de la Libertadores, en busca de su séptimo título.
